Es penoso ver como profesionales del béisbol se pierden en la historia y cuando Dios le reclama para su última morada…miles de fanáticos le recuerdan y resaltan lo bueno de sus vidas.
Esa sorpresa me acaba de impactar hace pocos minutos cuando llego la triste nueva de que Ramón Avilés, el jugador del cuadro nacido en Manatí, Puerto Rico, falleció hoy 28 de enero del 2020, en su residencia en dicha ciudad a los 68 calendarios con 6 días de vida.
Han transcurrido unos ocho calendarios desde que le vi por última vez en un centro médico de Manatí cuando fui a visitar a un viejo amigo. Saliendo del ascensor rumbo al estacionamiento me lo encontré y hablamos por algunos minutos y si la memoria no me es infiel me comunico que estaba batallando contra la diabetes. Le vi un tanto flaco y pálido… ¡pero gentil como siempre!
Pocos saben que Ramón, siendo miembro de los Phillies de Philadelphia, aunque no jugó en la Serie Mundial del 1980, se ganó una codiciada sortija como miembro del equipo ganador. Y que fue tío del jugador del cuadro como el….Mike Avilés…quien jugó diez temporadas en Grandes Ligas con Kansas City, Boston, Cleveland, Detroit, Miami.
Ramón, de 5′ 9″ de estatura y unas 155 libras, militó en Ligas Menores durante trece temporadas y en 1224 juegos bateó .247 con 9 jonrones 324 carreras anotadas y 324 impulsadas. En total conecto 892 imparables en los niveles Novato-A-AA-AAA. Defensivamente en segunda base, en campo corto y en tercera base fildeo un aceptable .971%.
En Grandes Ligas debutó con Boston frente a Milwaukee el 10 de julio del 1977. En total milito en esa pelota grande durante cuatro temporadas y su último juego fue con Philadelphia frente a los Cachorros de Chicago el 4 de octubre del 1981. En ambos partidos no consumió turnos oficiales al bate.
En las Mayores, siendo jugador suplente deluxe mayormente en segunda base, campo corto y tercera base, fildeó un aceptable .960%. En 117 partidos, bateó al son de.268 con 2 jonrones, 21 carreras anotadas y otras 24 impulsadas.
Egresado de la Escuela Superior Fernando Callejas en su pueblo natal, en la Liga de Béisbol Profesional de Puerto Rico (Roberto Clemente) militó durante 16 temporadas con Arecibo, Ponce y Mayagüez. Para sus estadísticas y datos históricos en dicha Liga refiérase al sitial-pagina (Internet) editada por el Historiador Oficial de la Liga de Béisbol Profesional, el respetado colega Jorge Colón Delgado. (https://beisbol101.com/ramon-aviles/ )
En su fase como dirigente estuvo al mando de los equipos representativos de Arecibo, Bayamón, Caguas, Carolina, Mayagüez y Santurce.
Entre otros logros de Ramón, encontramos su selección al Equipo Todos Estrellas representando como segunda base a Mayagüez en la jornada 1977-78.
Durante la Serie del Caribe 1983, con Arecibo en Venezuela, fue la bujía inspiradora para que Puerto Rico se proclamara campeón con 5 victorias y 1 derrota. En la Serie del Caribe 1987, tras Tim Foli ser despedido, Ramón tomó las riendas del equipo (Caguas) que copó dicho clásico para Borinquen con record de 5 triunfos y 2 reveses.
No olvidemos que Ramón fue el gerente general del equipo de Puerto Rico—«El Dream Team»—en la Serie del Caribe 1995 en San Juan, Puerto Rico.
Jamás olvido que en los tantos viajes cuando éramos miembros de los Texas Rangers…Juan «Igor» González solía decir, «Estoy aquí en las Mayores metiendo palos y nunca olvido que Ramón Avilés fue el primer hombre de béisbol que en nuestra liga con Caguas, creyó en mí y me dio la gran oportunidad de jugar. En Ponce jamás creyeron en mí. Y mira, gracias a Dios donde he llegado».
Hará ya casi más de cuatro décadas, un día visite a Ramón en el corazón de Manatí y estando allí su gentil madre me obsequio un vaso de la mejor «horchata» que he probado en mi vida.»
Desde esa visita, cada vez que o veía en o fuera de Puerto Rico le pedía bromeando, «Chico, tráeme un termo gigante con «horchata» de la que prepara tu mama.»
El termo jamás llegó…pero en nada afectó nuestra hermandad.
Ramón…en mejor lugar no puede estar tu existencia, ahora totalmente en el plano espiritual estas al lado del Todopoderoso y el mejor que nadie que tu misión en vida fue muy honrosa y especial.
¡Duerme en paz…Dios y sus ángeles te cuidan!
¡Gracias…gracias por tu amistad!
Foto Ramón Avilés e Iván de Jesús (archivo beisbol101.com)
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