El Béisbol, contrario a la política y las religiones, une a las personas, países y culturas

Luis Rodríguez-Mayoral, el entonces Presidente de los Estados Unidos, George W. Bush y estelar pelotero Boricua que fue, Juan «Igor» González, en su segunda visita a la Oficina Ovalada, Casa Blanca, Washington, DC, el 3 de diciembre del 2007. El béisbol ha permitido una linda amistad de unos treinta almanaques entre estos tres hombres del béisbol. (Foto Oficial de la Casa Blanca).

Acá en Dallas, Texas, a unas 2165 millas del Aeropuerto Luis Muñoz Marín en Carolina, Puerto Rico, llevo mucho tiempo sufriendo por mi gente hermana Boricua.

La situación de mi Isla querida ha estado nebulosa en muchos aspectos hace ya múltiples décadas. La masa Boricua está sufriendo muchísimo a consecuencia de ejecutorias de personas en el gobierno…sus decisiones, sus prioridades…en gran parte, tal vez, debido a ‘viajes del ego’ en el plano personal.

Y no olvido que las religiones han sido causas de guerras hace ya unos dos milenios alrededor del Mundo!

La amistad de Juan «Igor» González y este servidor data más de treinta almanaques con quien fuese figura cimera de los Texas Rangers en el béisbol de Grandes Ligas y luego presidente de los Estados Unidos…George W. Bush.

Entre otras cosas muchas veces hablábamos del equipo, del juego per se y de su ídolo desde su juventud Willie Mays, al igual que de Roberto Clemente. Sin ser políticos, durante su gobernación del Estado de Texas, tanto Igor como este que escribe le respaldamos, cada cual en su rama, en cuestiones a beneficio de los ciudadanos. Poco, es más…casi nunca…hablamos de política con George W. Bush.

En nuestra primera visita con el Presidente Bush (dada su invitación en el plano personal) en la Oficina Ovalada en Casa Blanca, Washington DC, nos acompañó el buen amigo, el representante Boricua del Bronx en Nueva York, José E. Serrano.

Dicha visita fue el 16 de abril del 2001. Se nos dijo, por sus asistentes que la visita estaba programada para 15 minutos…pero nuestra amistad inspiro a Bush y la reunión de amigos beisboleros duro una hora con diez minutos. Tan contento estaba Bush que minutos después de que nos recibiera apareció otro beisbolero…el Vice Presidente Dick Cene.

Para ese entonces…Puerto Rico vivía la situación difícil relacionada con la isla municipio de Vieques. Días antes en charla con Serrano, el jonronero Boricua y este servidor, tocamos el tema de Vieques y el experimentado congresista entendió que el tema…con decoro y debido respeto al Presidente de los Estados Unidos pudiese entrar en nuestra charla.

En su momento dado, Igor, quien posee muy buen verbo, le dijo más bien al amigo, «Nos preocupa la situación de Vieques. Allí hay muchas personas sufriendo…gente buena…gente sana, Como los puedes ayudar?»

A eso, con su acostumbrada calma y compostura, manifestó Bush, «Ese en un problema que herede y les prometo que lo resolveré.» Y así, dicta la historia, aconteció.

(Lo antes relatado brota de mi memoria y tal vez no exactamente palabra por palabra. Pero así lo recuerdo).

Soy fiel creyente en la comunicación, al igual que Igor y Serrano. El béisbol en aquel entonces, mediante nosotros, trabajo como un gran ‘embajador de buena voluntad’ de una forma muy decorosa y humana. El béisbol fue un común denominador para resolver una muy difícil situación.

En la vida uno no puede actuar a base de coraje, fanatismos políticos o personales. Dios ilumina los seres humanos y hasta que muera seguiré pensando así…al igual que Igor y Serrano!

En mi apreciación la visita a Bush fue programada por Dios y la aprovechamos…sin ser políticos o activistas…buscando la solución a un problema que afectaba el espíritu de nuestra Isla!

De esa experiencia los tres vivimos con silente orgullo. Más se logra con amor hacia la humanidad que con coraje, soberbia u odio.

De surgir en nuestras vidas una oportunidad similar estoy seguro que procederemos de igual manera.

Para este que escribe…mi felicidad está basada en ser Hijo de Dios y Ciudadano del Mundo…sin connotaciones políticas algunas.

En humildad le doy gracias a Dios por ser….periodista y hombre del béisbol.

(FOTO: EL autor, Luis Rodríguez-Mayoral, el entonces Presidente de los Estados Unidos, George W. Bush y estelar pelotero Boricua que fue, Juan «Igor» González, en su segunda visita a la Oficina Ovalada, Casa Blanca, Washington, DC, el 3 de diciembre del 2007. El béisbol ha permitido una linda amistad de unos treinta almanaques entre estos tres hombres del béisbol). (Foto Oficial de la Casa Blanca).

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

error: Este contenido está protegido
Scroll al inicio